AlpArray mira en las profundidades de la tierra

Observar y comprender nuestro planeta es hoy más importante que nunca. Mientras que muchos satélites ofrecen una visión de la superficie de la Tierra desde el espacio, AlpArray es una iniciativa de ámbito europeo para mirar también en las profundidades de la Tierra. Con instrumentos de medición extremadamente sensibles, es posible mirar kilómetros por debajo de la corteza de la superficie. “Examinamos la tierra como un médico que mira dentro de nuestro cuerpo durante una ecografía, con la diferencia de que utilizamos ondas sísmicas”, explica el licenciado Erik Grafendorfer, especialista en tecnología de medición de la Universidad de Viena. “Nuestro equipo de medición es tan sensible que incluso podemos detectar un terremoto en la India y Sudamérica”. Incluso es posible detectar explosiones militares y así, por ejemplo, controlar la prohibición de las pruebas nucleares. Por ello, es importante que los datos se transmitan siempre de forma fiable. Por ello, el Instituto de Meteorología y Geofísica confía en el FRITZ!Box.

Para no falsear las mediciones de unos instrumentos tan sensibles, los puntos de medición están situados lejos de cualquier civilización. Para la conexión a Internet y, por tanto, al ordenador central del Instituto, se utiliza la red móvil A1, que permite la conexión a la red incluso en los lugares más remotos. Sin embargo, también es necesario un hardware fiable para transmitir los datos de medición en tiempo real. Sin embargo, Erik Grafendorfer no ha tenido buenas experiencias con soluciones industriales caras. “Todo el tiempo, los módems se colgaban y dejaban de entregar datos”, así recuerda los primeros problemas. “Hubo que enviar a alguien a la estación de medición remota especialmente para reiniciar, solo para desconectar el módem de la corriente durante 5 segundos. Fue patético”, dice Erik Grafendorfer. “Desde que empezamos a utilizar el FRITZ!Box en nuestras estaciones de medición, ya no hay perturbaciones ni problemas. Ahora estamos siempre conectados a la estación de medición en todo momento, por muy alejada que esté”, dice el técnico con alegría.

El FRITZ!Box no solo sirve como módem, sino que también facilita el trabajo gracias a muchas funciones adicionales valiosas e importantes, como el acceso remoto seguro al ordenador central del instituto. Esto significa que el personal de Viena tiene acceso al FRITZ!Box en las diferentes ubicaciones en todo momento y puede incluso realizar actualizaciones o cambiar la configuración a distancia si es necesario. “Configurar un FRITZ!Box es un juego de niños”, afirma Erik Grafendorfer. ”Y aunque es más barato que la solución anterior, el FRITZ!Box es 100% fiable, lo que es extremadamente importante para nuestra investigación y trabajo”, subraya Grafendorfer.

Como las estaciones de medición en los Alpes están alejadas de cualquier infraestructura, pero la electricidad es necesaria para las necesidades energéticas de los instrumentos, las estaciones individuales están equipadas con células solares. Si las células solares no proporcionan suficiente energía, se utilizan pilas de combustible. El metanol se quema para generar electricidad. Sin embargo, normalmente esto no es necesario, también porque el FRITZ!Box apenas necesita energía a pesar de su alto rendimiento.